En la soledad de mis momentos
me abrazo al río en un festín
de fantasías,
tejeré sueños dormidos
al borde de la corriente
y si mañana muero de indiferencia
quemen mis carnes
que cenizas fueron
y serán también restos de olvido,
quizás me alumbre la luna
y bañe hechizos
mi silueta de otoño
y me iré despacio
muriendo de a poco
en la tarde
recordando mil historias
truncadas
que quise vivir
y sólo fueron deseos incumplidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario